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lunes, 2 de julio de 2012

ECOS DE LA JORNADA ELECTORAL.


Empiezo haciendo una pequeña crónica de la fecha en la que sólo tenemos oportunidad de cambiar el rumbo de nuestro país. 

Ayer la mañana nos sorprendió con una de las tantas lluvias de estío, pero eso no menguo un extraño ánimo que sentía por llegar a la casilla a votar. Como hace dos años, fui a la sección que me correspondía con mi padre.

Y acudimos pocos minutos antes de las nueve. Los funcionarios de casilla estaban retrasados de tiempo, los observadores veían la actividad desde una distancia prudente entre la mesa y el área de votantes. varios vecinos se empezaron a desesperar y armaron un pequeño motín. Al ver el lento proceder, decidieron marcharse.

Ubicación
Ni tardo ni perezoso, me auto retraté el pulgar
que  ratifica la emisión de mi sufragio.
Hay dos casillas: la principal y la contugua. a mí me toca esa, porque le corresponde la segunda parte de los apellidos que inician con L hasta la Z, entonces Martínez le corresponde. Ahí se creó una pequeña polémica generada por la Real Academia Española de la Lengua Castellana: una señora iba de una casilla a otra porque su apellido inicia con la extinta "LL".

Me tocó mi turno, les entregué mi credencial para votar y revisaron que estuviera mi nombre en la lista,misma que tuveron una copia cada representante de partido. Al recibir mis 3 boletas tomé precauciones que casi rayan en la paranoia: con una pluma "cautericé" mi voto y después lo remarqué con ese extraño lápiz rosa que parecía colorete para maquillarse por el color de la madera, pero la textura parecía de grafito. 
Aquí confirmo lo que dije en mi texto anterior. La boleta era una auténtica burla. en vez de poner cuatro espacios por el número de candidatos, pues no, era un espacio por cada partido, coaligado o no, y aparte el inútil espacio para el ya inconstitucional candidato independiente.

Con todo y eso, coloqué en cada urna mis opciones. Después padre e hijo nos fuimos a tomar un café en el oxxo, con una nueva unidad monetaria: tu pulgar manchado con tinta indeleble.

A partir de las ocho de la noche,en lo que le echabaun ojo a la tele y otro a la compu veía las tendencias, pero me quedé viendo el PREP que el IFE arrojaba con la ayuda de Google. todavía pienso que se me hace demasiado pretensioso que los otros candidatos hayan asumido su derrota y que el más aventajado festeje su triunfo, como llegué a leerlo en las cabezas de varios diarios. 

En estos momentos que estoy redactando estas líneas, no he podido acceder a la página de www.ife.org.mx 
¿Por qué será?

P.D. Televisa del Golfo fue uno de los que empezó a consultar y divulgar los resultados del PREP.

domingo, 1 de enero de 2012

EL PRIMER TEXTO DEL NUEVO AÑO Y EL FINAL QUE NO FUE

Hace 26 años, ya escuchaba, cuando niño, que el mundo se iba a acabar en el 2012. Por lo regular la gente toma lo que le conviene del apocalipsis y lo usa no sólo para asustar a las personas, sino para dar una fecha exacta de esos tiempos aciagos, especialmente algunas asosicaciones religiosas que han predicho algo parecido y que jamás se cumplió.

El hecho es que una vez empecé a soñar con una casa que estaba mal iluminada y tenía un almanaque colgado en la pared. Lo curioso es que ese calendario no tenía fecha ni año. Todos sus cuadrados estaban vacíos.

En ese tiempo no entendía tal cosa, pero si le damos una interpretación quiere decir que no hay fecha exacta y sólo Dios sabe cuando va a ocurrir eso. El calentamiento global es sólo un indicativo de qué tan mal le está yendo a nuestro planeta. Y sí, el mundo se está destruyendo.

Llegó el dos mil, y unas de las noticias tristes es que en varias partes del mundo muchas personas se suicidaron un día antes de que comenzara el nuevo milenio para evadir el supuesto fin del mundo. Pero a veces el fin del mundo se acerca cuando su propio universo se colapsa.

Otros, por esos acontecimientos, suspendieron sus vidas, total se va a acabar el mundo.
No podemos estar como en aquel relato de Gabriel García Márquez, donde un pueblo fue destruído por el rumor de que algo malo iba a pasar.

Ya estamos en el dos mil doce, no es el año del calendario maya, es el de la que se concordó para poner a raya los tiempos en toda la tierra. Y comience a pensar en cosas bonitas.

Dios puso ya este año, gócelo y déle gracias a Él.

A propósito. ¿Por qué digo que las décadas inician con cero y no con uno?

De esto hablaré en la próxima entrega.

Feliz 2012.